Callejea por Algeciras, punto de unión entre Europa y África, hasta adentrarte uno de sus barrios más populares. Almacenes chinos multimarca, tiendas de vapeadores, institutos de enseñanza y… de repente, Canela y Trigo, la Catedral del pan en todos sus formatos. Es el centro de trabajo de Carlos de Arcos Martín, panadero y pastelero de cuarta generación volcado en el futuro gourmet.
Carlos de Arcos y su equipo atesoran los secretos del pan de hoy y del mañana, del pan que no… engorda, del pan que no… castiga el aparato digestivo, del pan que regala… tus sentidos por textura, aroma y sabor.
Sus panes, elaborados artesanalmente con recursos milenarios que ya aplicaban los egipcios, son los mejores del momento y avanzan los favoritos de mañana.
Os lanzo un “spoiler” para caldear más este descubrimiento: Canela y Trigo trabaja sin levaduras en muchos casos… ¿cómo os quedáis? Otro avance más, también de origen egipcio: el pan con un contenido importante de vitamina C, ideal para todo tipo de clientela. Adelanto que Carlos de Arcos trabaja con zumo de naranja. Nada más.
Canela y Trigo es el sueño de cualquier amante del pan y la pastelería, un escaparate de las propuestas más desafiantes del momento. Los panes distribuidos por los mostradores y baldas de este local amplio, especialmente acogedor, se venden a ritmo frenético, hasta desaparecer, en manos de clientela de todas las edades y de todos los estilos.
CREATIDAD PANADERA CON RÁICES
Carlos de Arcos y su equipo sorprenden con panes que se salen de los cauces clásicos. En Canela y Trigo hemos encontrado panes con: rulo de cabra y cebolla caramelizada, roquefort y nueces, chía y cúrcuma, tomate, Nutella y… la gran sorpresa, manteca “colorá” con chicharrones gaditanos.
Es algo muy serio. El pan de manteca y chicharrones que se elabora en este establecimiento nace, y nunca mejor dicho, de 20 kilos de masa y 12 kilos de chicharrones. Así os explicaréis el aroma de cada pieza y el sabor profundo que se disfruta tanto en una pieza de gran tamaño como en unos colines magistrales.
También hay panes clásicos, de nivel supremo: espelta integral, 3 harinas integrales, avena, sarraceno, hogaza gallega, o Kamut, el trigo egipcio que inició todo el recorrido de este alimento básico, que ahora es un verdadero bocado gourmet gracias a artesanos como Carlos de Arcos.
La sabiduría de aquellos panaderos egipcios 3.000 años atrás es clave para desarrollar la nueva generación de panes que encuentras en Canela y Trigo. Aquí solo hay espacio para panes hechos a partir de masas madres activas, que no son tantas como parece aunque ese detalle sea el reclamo para los panes industriales ambiciosos, y de fermentaciones naturales.
BENEFICIOS DEL PAN BIEN HECHO
Resumo el listado de beneficios del pan auténtico, gourmet, que complace por completo a quienes aprecian este manjar, a millones de años luz de ese terror conocido como “pan de gasolinera”.
El cartel inmenso que preside Canela y Trigo indica:
- Mejora la digestión. Ese tipo de elaboración permite que el sistema digestivo tarde menos en procesarlo.
- Digestión más nutritiva. Aquí interviene la masa madre activa, que potencia la producción de ácido láctico para absorber mejor los minerales en el sistema digestivo.
- Bajo en gluten
- Se conserva de manera natural. El pan con masa madre activa inhibe el crecimiento del moho.
- Engorda menos.
- Contiene muchas vitaminas y minerales, gracias a la aportación de la masa madre.
- Mejora la textura y el sabor. Este punto lo confirmamos nosotros tras probar varias de las especialidades comentadas hace un momento.
- Beneficios a largo plazo. Ya que previene la diabetes y las intolerancias.
El pan tiene presente y tiene futuro, como corresponde a un alimento básico que es saludable y sostenible cuando se elabora con los principios de Carlos de Arcos en ese escenario imprescindible de Algeciras, en Cádiz: Canela y Trigo. Déjate llevar… aunque tengas que atravesar toda la Península.
